Siempre me pregunté que me hiciste. Que
hiciste para que mi piel vibrara bajo tus manos. Que hiciste para que mi cuerpo
anhelara estar junto al tuyo. Que hiciste para que el tiempo pasara volando
cuando estábamos juntos. Que hiciste para hacerme sentir tanto.
Pensé que tenías
un don. Pensé que sabías algo que el resto del mundo ignoraba.